viernes, 25 de noviembre de 2011

Acerca del Arte


En una de esas tantas cenas coloridas, en un recinto plagado de porteños oportunistas, degustaba casi al mismo tiempo que saboreaba los viejos vinos, añorando el típico menú de la noche y escuchando atentamente las palabrerías de unos cuantos peronistas.
Atesoré los momentos en que el silencio azotaba las miradas y  reproché, pero no tanto, las injurias que atravesaban mis pensamientos, por cierto, la desesperanza, en efecto, de que estuviera justo allí, sentado, observando, otorgando infamias en el nombre de cristo e involucrando a unos cuantos apóstoles.
Confieso que podría haber sido peor, ya que mi desconsuelo era tan abrumador, que en las extensas horas de la noche, cuando el apogeo retornaba y era turno de retirarse, tuve la oportunidad de cruzarme con un hombre más desafortunado que yo, y entendí que a partir de ahí, en el recinto, en lo que a mi me respecta y en cuanto a lo demás, sería absoluto.
-¿Cuál es la finalidad del artista? Sostuvo.
-Tratar de realizar algo bello supongo, o tan sólo algo verdadero. Urgí rápidamente.
-No tiene por que ser así, el arte se trata de eso en realidad, nunca se sabe bien para que sirve, sólo está y merece la eternidad.
No iré a remitir cuanto duro la conversación, pero fue pedante y a su vez amena. Comprendí que en esa noche, de esa larga charla filosófica, en esos ratos de vacilación y reflexión, entre fantasmagorías y desencuentros, el juego de la eternidad y el arte se iban entrelazando en cada tema que tenía con el orador. Me pregunte si realmente se podía concretar ese sueño. Asumí que si de ésta manera entendía al arte sería eterno quizás también.
Ambos nos retiramos de la reunión, con los pies hacia delante pero con los rostros bifurcados, uno, asumiendo la proyección del discurso ya antes mencionado, y otro, con la certeza de que la depresión y soledad nos cobrarían peaje en la próxima parada en que nos viéramos.
H.B


miércoles, 23 de noviembre de 2011

Viva

Vastos Años he sido la cabellera rebelde inmensurable de una criatura que nació para luchar por tus derechos. 
Todo eso finaliza hoy.
Por supuesto que estaba más arriba, más arriba que todos ellos. Ahora soy yo quien crea los juegos, soy yo el que determina que pieza se cae y vuelve a subir.
Mientras el resplandeciente sol roza mi cara, la cortina se desliza tenuemente tras el golpe del viento, mis ojos se entristecen pensando en el mundo hostil en el que dios me ha invocado.
Contradicción, ¡vaya contradicción! Ya que el dios todo podero ahora soy yo.
No todos los hombres son los hombres ni tampoco es nefasto derramar sangre de otro hombre.
Soy el que juega con el fuego y no se quema, soy todo lo que no quisieron amar. Soy la causa y efecto de una prueba fatal. Soy el que prende y el que apaga la luz.
Soy el hijo del mal, soy el hijo del más allá.
Soy La cabellera rebelde inmensurable de una criatura que nació para luchar por mis derechos. 
H.B

viernes, 18 de noviembre de 2011

El Fin de la Simpatía

El Fin de la simpatía
Corría el término del mes, en esa misma corriente, la temple era densa, los trapos no estaban como para tapar absolutamente nada. Para entonces los tres: Richard, Jagger y Wyman decidieron volver de Marruecos y dejar a Brian Jones en los templos de donde se habían marchado. Sin duda alguna querían dejar que a éste se lo tragara el desierto.
A: En aquel momento Brian Jones ya no era fundamental en el grupo, Keith y Mick componían la mayoría de los temas, también Wyman dejaría la banda por razones de inclusión, pero bien se llevaría a cabo años después, en los 80, pero ni más ni menos llego a editar “Exile on the main street” en el 72. Vale destacar que ese mismo disco "Exile" fue hecho en la mansión al sur de Francia, propiedad de Keith, si bien fue el mejor disco de rock en los últimos tiempos, nada tenía que ver con la forma de componer de Brian Jones ese álbum, ni más ni menos, no se le asemeja.
B: La tez blanca, el pelo rubio corto taza, la mirada penetrante. Los ácidos se habían transformado en parte de su vida y de seguro esta elección fue un gran promotor en la ida de los Stones.
Dato no menor, Su apariencia había cambiado drásticamente, Jones tendía a ser más lúcido. Era introvertido y tímido pero esto no hacia que sacuda su tiempo en la mera  reflexión, que sea rápido y tenga momentos de chispas.
Lamentablemente, para esa época sólo lo envolvían las drogas y había subido de peso enormemente.
Ahora bien, la banda tenía muchas más letras que la A y la B para fundamentar la retirada del multiinstrumentista. Pero hay algo más que me lleva a escribir esta breve reseña del colapso, del fin de Brian, del ocaso permanente.
No sólo salir de los stones significó que debería hacerse a un lado e inclinarse a solista, si no que esto significaría la muerte de tantos años de esfuerzo, de haber hecho tantas cosas para formar la banda y hoy ser él, quien debía irse. Estaba perdido, sumergido en la derrota anímica más crucial.
Para ese entonces los J, todavía no habían muerto todos, pero yace aquí el misterio: a la misma edad, bajo las mismas sustancias, le llega la despedida a Jimmy Hendrix, Janis Joplin y Jim morrison. Gran interrogante que no he de descifrar, capaz sería por el contexto y el consumo de LSD, pero no quiero inclinarme al péndulo de la obviedad y preferiría otorgarle al destino la suerte divina, ni siquiera inclinarme por el lado Satánico del asunto…, ni mucho menos eso.
Por lo que me compete, he tenido la posibilidad de escuchar la banda solista, el disco de estudio que grabó Brian jones " The Pipes Of Pan At Joujouka" me pareció una muestra extraña, bastante macabra si se podría decir, con matices, pero muy opaco, un ritual introspectivo, pero asumo que nada que ver con lo que se esperaba, o si?
Fue ahí, antes que la llamada del representante de Hendrix golpeara en su sala de visitas, ya vuelto de la incursión del viaje a Marruecos, decidió darle la espalda.
Ya hasta inclusive el mismo había decido volcarse a otros materiales, otras composiciones, pero reitero, nada bueno. Se acercaba el fin de la simpatía.
El fin de la simpatía Los rastros, las evidencias, los peritos, nada involucro a nada. Y así fue la absorción de nadie y así término la vida de Jones, en la nada misma.
 Dejó tirado su hermoso cuerpo en la piscina, dejando los compases, la gran creatividad de su genio, que por su intimidad, su inestables trastornos (en cuanto a su vida tuvo un diagnostico severo, rozando la esquizofrenia.)Lo llevarían tarde o temprano a ese cruel destino.
El fin de la simpatía Hay algo que sobresale del lado oscuro de Brian, que va más allá de la Lujuria, la infidelidad, los altibajos y el infierno. Estos son sus temas, su estética en el escenario, su manera de cambiar de estructuras del jazz y del blues, aficionado al rock and roll del 12x15, un hombre de familia musical nos deja los mejores discos experimentales de los Stones.
En fin, les recomiendo una buena pelicula de jean luc Godard "Sympathy for the devil", en donde se refleja el lado subrealista del director y como notoriamente lo dejan de lado a nuestro Jones, a eso viene el nombre de la nota que ironicamente lo sustraje de allí. Me retiro de la reseña citando una frase del mismísimo Will Wyman  “Si hubo alguien que representó todos los emblemas del Rolling Stones, ese fue Brian Jones”.

Escuchar:
After Match.
Flowers.
Their Satanic Majesties Request.
Beggars Banquet.

H.B